lunes, 24 de enero de 2011

Siempre me he considerado una persona muy controladora. Necesito saber lo que pasa a mi alrededor en cada instante, y no solo en el exterior, tambien tengo que tener la certeza de que mi caos particular se encuentra en orden. Controlo todo lo que me rodea, el tiempo, los gestos, los acontecimientos, todo analizado minuciosamente. Que no se escape ningún detalle. Eso me lleva a vivir de la manera en la que lo hago, muy pocas cosas me pillan por sopresa, y las que lo hacen realmente consiguen impresionarme ya que son pocas las que, creo, escapan a mi control. No es que sea especialmente divertido estar calculandolo todo, ni midiendo el tiempo con mucha frecuencia, y mucho menos anticipandote a acontecimientos formulando una larga lista de probabilidades en las cuales tiene que encajar todo y nada se pasa por alto. Todo esto hace que arriesgar pierda su significado, aunque arriesgue, se que por una alta gama de probabilidades fracasaré porque aun estoy experimentando para ganar experiencia, y sin fallos la experiencia es nula. Lo malo de ser tan controladora es que muchas veces algunas de esas "posibilidades" te lleva a embarcarte en un mundo muy peculiar cargado de paranoias y conclusiones sin sentido que en el fondo guardan mas sentido del que mi mente le otorga. La ventaja de analizar tu alrededor, que pocas veces fallas en lo que piensas, sea para bien o para mal. Tampoco pienso que sea como una "vidente" en ese sentido, solo que mirando los acontecimientos se puede tener una prevision mas certera del futuro. ¿Qué esto le quita interés y magia al asunto? Puede ser, pero yo aún conservo la misma ilusión de cuando era niña. No me arrepiento de mi modo de vida, algunos piensan que son años perdidos y yo lo considero experiencia adquirida. Todo depende del punto de vista del que se mire. Pese a mi peculiar fallo tengo una gran virtud, he amado a alguien con todo mi alma y eso siempre me ha sido suficiente, una vez más, como era lógico pensar, acerté en mi predicción pero con poder sentir una sensación asi de maravillosa no hay mal ninguno que se anteponga ante mi.
Sé que fallare 37960473 veces más, pero estoy ansiosa por hacerlo.

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